Nogueroles y el alcalde ante los restos.
El director general de Vivienda y Arquitectura, Marcos Nogueroles, y el alcalde, Eduardo Contreras, visitaron ayer las obras de acondicionamiento del espacio público del Mirador del Castillo, fruto de uno de los convenios entre la Comunidad Autónoma y los ayuntamientos para mantener las inversiones destinadas a la conservación del patrimonio histórico, y con las que, en este caso, se mejorarán el Castillo de Molina y sus alrededores, al actuar también sobre la Casa de la Maita.
Obras Públicas va a rehabilitar la Casa de la Maita, adquirida en 2005 por el Ayuntamiento y situada en el histórico Barrio del Castillo. El objetivo de la Consejería es revalorizar el elemento más significativo conservado de la Molina medieval, ya que dentro de la actual edificación se conserva parte del alzado de la Torre del Homenaje de la alcazaba almohade, así como un aljibe de los siglos XVII-XVIII.
El presupuesto de este proyecto asciende a 632.828 euros, financiados al cincuenta por ciento por la Consejería de Obras Públicas y por el Consistorio molinense. No obstante, la inversión podría ampliarse debido a la modificación del proyecto inicial, condicionada por el hallazgo de restos arqueológicos. Ello también puede provocar que se prolongue el tiempo de ejecución de los trabajos, iniciados a mediados de septiembre.
Además, el alcalde ha indicado que el Ayuntamiento ya ha iniciado contactos con el propósito de adquirir una vivienda adyacente a la Casa de la Maita, donde se tiene la constancia de la existencia de restos. Contreras ha resaltado el «cambio sustancial» que experimentará el barrio con las actuaciones que se acometen en el Enclave de la Muralla, la rehabilitación de la Casa de la Maita o la restauración del antiguo Horno del Concejo.
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