«El mayor enemigo de este árbol es el hombre y el cambio climático que está produciendo» «La mejor variedad es el dátil pasa, que se queda en la palmera concentrando todo el azúcar»
Para llegar a la vivienda de José Lozano hay que cruzar el mismo río Segura, alejado del pequeño núcleo urbano de Ojós, muy próximo a la montaña, y como no podía ser menos vive a la sombra de una palmera que ha conocido durante toda su vida. Procede de Ricote, pero ya de joven se situó en este pueblo que honra a San Agustín por patrón; sus sesenta y dos años de vida la ha dedicado siempre a trabajar en estas tierras, pues conoce palmo a palmo tanto el monte como el valle, veinticinco años acaba de cumplir dedicado a las palmeras y actualmente es el único palmerero de todo el Valle de Ricote.
-La palmera siempre se ha identificado con el valle ricoteño, ¿quedan muchas actualmente?
-Un poco difícil es contestar a su pregunta; principalmente porque muchas de ellas se encuentran ocultas entre ramblas, o en riscos de la montañas, ocultas entre cañaverales o en mitad de un bancal privado; es decir, que es muy difícil y nunca se ha llegado a realizar un censo de palmeras en el valle; pero haciendo un esfuerzo mental, y en base a toda mi trayectoria de trabajo con ellas le diría que hay unos dos millares de ejemplares, Archena es el municipio que más tiene y le continuaría Ojós, con unas trescientas.
-¿Por qué hay más en Archena?
-Por una razón muy sencilla. En este pueblo se conserva una zona privada conocida por El parque de la Marquesa, y aquí adoran este árbol, hasta el punto de que incluso disponen de un cementerio para las palmeras.
-Últimamente estoy escuchando muchas cosas sobre las enfermedades de estas plantas que hacen que se sequen muy fácilmente.
-El mayor enemigo de las palmeras es el hombre, el cambio climático que este está produciendo; yo he observado que en estos treinta años han desaparecido palmeras centenarias en esta zona. Ellas nunca han tenido enemigos, han sabido protegerse a sí mismas; sin embargo hace unos catorce años aparecieron plagas del pulgón y unos hongos que formaban bolsas como la procesionaria en los propios racimos de dátiles; y por si fuese poco últimamente nos ha llegado el picudo rojo, aunque esta plaga aún no la he visto por el Valle.
-¿En qué época hay que subirse a recolectar los dátiles?
-Depende de cada variedad de palmera; están las tempranas que empezaba a cogerles los racimos de dátiles a finales de septiembre, pero por lo general las palmeras nunca han tenido a unas fechas fijas para madurar, han variado según ha ido el año en lluvias, sol, calor, etcétera; antes iban madurando de forma progresiva entre septiembre y diciembre; es decir que había tres meses de trabajo.
-¿Cuál es la mejor variedad?
-Las mejores son los dátiles pasas, van madurando progresivamente y se quedan en la misma palmera secos, concentrando todo el azúcar, como éstos no hay otros. También están los dátiles verdales que son muy buenos.
-¿Cómo puedo coger los dátiles maduros?
-Lo mejor de todo es que vayan madurando en la propia palmera, pero para poder aprovechar el racimo se corta cuando están ya a punto de madurar, en este caso en la punta del corte de la palmeta, que así es como se llama la rama a la que están sujetos todos los tallos de dátiles, se coloca una naranja madura y la uva de dátiles se sitúa en un lugar oscuro, y de un día para otro se van madurando.
-¿Cuántos dátiles puede dar de sí una palmera?
-Hasta 300 kilos, pero conviene no quitarle todas las uvas, sólo parte de ellas. Si no, al año siguiente no produce y pasa a convertirse en una palmera añera, es decir que produce año sí, año no.
0 comentarios: