A unos tres kilómetros de Totana existe una zona con arcilla especial que siempre está a punto para ser trabajada. De ahí la fama alfarera del pueblo.

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El Poveo, o alfarería del Poveo es lo que tienen que preguntar si alguna vez se les ocurren pasar por Totana para visitar el taller de Juan María Martínez. No se le conoce de otra manera, y la cuestión no es de hace cuatro días, sino de cuatro generaciones que se instalaron en este municipio, famoso por sus trabajos alfareros, una familia que la bisabuela por lo visto tenía de apellido Povea, pero al trabajar el hombre ella no quiso que se perdiese su apellido y dijo que aquel taller -de hace ya más de cien años- era del Poveo, y desde entonces han cambiado las personas, han continuado las generaciones, pero Poveo será siempre; y ahora, en el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Industriales, y hasta finales de diciembre pueden contemplar una selección de sus trabajos.

-¿Cuál es su especialidad?

-Hacemos de todo. Botijos, cántaros, ánforas esmaltadas con los dibujos que nos piden y también muchos lebrillos.

-¿Pintan ustedes las ánforas?

-Por supuesto, en este caso la especialista es mi mujer, Mercedes Tudela, ella es la que tiene unas manos muy finas para el pincel, realiza los dibujos de los azulejos, e incluso los adornos muy artísticos de las ánforas, hasta el punto que cuando se casaron el príncipe Felipe con doña Leticia, una asociación de Cieza nos pidieron les hiciéramos un par de ánforas con la corona real y se las enviaron como regalo de boda.

-Y en el caso de lebrillos ¿son ustedes los expertos en los lebrillos que dicen totaneros típicos de la huerta?

-Por supuesto, es si cabe la obra que más sale de esta taller. Son prácticos y mantienen muy bien el embutido de las matanzas de los cerdos; otros de menor tamaño se utilizan para hacer la masa de los dulces. En realidad en este aspecto hemos trabajado lo que los huertanos y también la gente del campo nos ha ido pidiendo.

-¿Cuál es el lebrillo más grande que ha realizado para una matanza?

-Normalmente son de 80 centímetros de diámetro, pero hemos realizado algunos realmente descomunales donde cabía todo el embutido de la matanza completa de un cerdo.

-¿Es cierto que antiguamente, en la zona de la huerta, existían incluso los lebrillos para los partos de las mujeres?

-Bueno, un lebrillo bien limpio tiene uso para todo cuanto en él se quiera utilizar, pero sí tengo entendido que como posición más arraigada en la huerta para que pariesen las mujeres era sentándolas, -bueno más bien colocándoselos en la parte baja de la espalda- un lebrillo totanero colocado boca abajo; y luego en otros lebrillos más pequeños se recibía al zagal o a la zagala.

-¿Qué tiene de especial la tierra alfarera de Totana?

-A unos tres kilómetros del pueblo existe una zona arcillosa especial. Era una arcilla que junto a la misma manaban agua de pozos subterráneos lo que hacía que siempre se mantuviese en un punto ideal para trabajarla; además por su composición era buenísima.

-Por todos lados se habla de la crisis ¿Cómo anda en este particular el mundo de la alfarería?

-Pues aún con mayor crisis. Hubo una época que los materiales de plástico hicieron una merma significativa en el mundo de la alfarería pues en gran medida sustituyeron muchas de las piezas que se utilizaban en casa, pero ahora es el producto proveniente de China el que nos está hundiendo el mercado, si bien no es la auténtica alfarería que nosotros trabajamos, pero quien tiene que hacer la compra prefiere un producto que externamente parece igual y lo adquiere casi regalado.

-¿Cuál es la pieza que con mayor cariño se pone usted a trabajar en el torno?

-Es el cántaro totanero, me enseñó mi abuelo de muy pequeño a trabajarlos y la verdad que me identifico con esta pieza, para mí es como la pieza que me sale del corazón; aunque mire usted que trabajamos muchas cosas, incluso los azulejos multicolores que también les gusta mucho a la gente, pero para mí, donde esté el cántaro totanero que se quite todo lo demás.

Fisgoneado en La Verdad.

This entry was posted on 12/26/2008 and is filed under , , , . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.