Si bien, la edición de comics, es, en Murcia, bastante parca, la calidad media de autores y obras elevan su interés y son dignas de elogio. En el repaso siguiente, observaremos que, el pasado año, presentó un ligero descenso ya que fueron 12 los títulos paridos, lo que supuso dos cabeceras menos respecto a 2007.
Cómo es habitual, la mayoría de ellos, nacieron a través de proyectos y capitales de organismos públicos, ya fueran Consistorios o Consejerías, quienes son los que mayores dineros manejan y menos riesgos afrontan. De sus esfuerzos surgieron cuatro títulos.
Desde el Ayuntamiento de Mazarrón: ‘Historia de Mazarrón’, una educativa e histórica obra del dúo Juan Álvarez y Jorge Gómez en la que se hacía un somero y divertido repaso a las vicisitudes y personajes del pasado de aquella localidad costera.
Histórico, también, fue la monografía ‘Saavedra Fajardo y el destino de Europa’ promovida por el Museo de la Ciudad como cuarto ejemplar de la serie Historietas de la Historia. Tras la trilogía de los personajes de la Murcia islámica, llegó la de los cristianos iniciada con uno de los representantes políticos más importantes del siglo XVII.
Para narrarla se contó con las buenas artes de Víctor Eme y Jesús Galvañ sobre los que sobrevoló la sombra del maestro Chipola que también puso su granito de arena en la planificación, diseño y aportaciones de profesionalidad gráfica.
Desde el Ayuntamiento de Blanca se presentó el segundo número de ‘Cauce 21’ como revista catálogo que englobaba ganadores y finalistas del prestigioso ‘Certamen Internacional de Comic Luís Molina’.
Por su parte, el Ayuntamiento de Molina de Segura, en colaboración con el Instituto de la Mujer de la Región de Murcia, editó ‘V de género’, una suerte de micro historietas, alegato gráfico contra la violencia machista, tan tristemente de actualidad año tras año.
La publicación iba firmada por el guionista José Ródenas y el dibujante Andrés García, ajenos al mundo del comic, quienes se iniciaban, con una obra ambiciosa.
En el apartado de la iniciativa privada, esto es empresas y asociaciones, hubo una mayor participación apuntando cuatro títulos. Dos de la editorial Nausícäa, dentro de la muy reconocida colección de humor gráfico ‘La tira de gracia’. Conformados como números 8 y 9 presentaban abultadas monografías del dibujante cubano Alfredo Martirena y el murciano Juan Álvarez.
El tercero nacido en las Fiestas de Moros y Cristianos a través de Los Templarios de Murcia y con las artes del humorista gráfico Álvaro Peña, narraba, en tan solo 4 páginas y un impactante diseño, una breve historia de ‘El rey Alfonso X, el sabio’.
El cuarto en discordia se tituló ‘Historia Ilustrada de Cartagineses y Romanos’, primero que la cartagenera editorial Áglaya, experta en tema histórico, editaba con infausto resultado. Obra de Paco Manzano, a medio camino entre dibujo y tratamiento fotográfico, en formato bilingüe, contaba algunos pasajes de la Segunda Guerra Púnica.
El tercer bloque de la edición murciana es, tal vez, el más interesante porque llega aportado desde la iniciativa del aficionado en la que, arriesgando capital y derrochando esfuerzo, intenta buscar un hueco en este difícil mercado.
A diferencia de 2007, pero aun dentro de la carestía, la cifra se duplica, siendo cuatro las aportaciones. Manu Riquelme se lleva la palma y, en 2008, edita un par de fanzines de extrema calidad: el segundo de ‘Qué Desidia’ y ‘Gloomy’, ambos en su línea dura, escatológica, zafia y muy divertida.
Guillermo Gil Dávalos, al que conocen bien los lectores de LA OPINIÓN por su personaje Hipólito que nos alegró la época veraniega, en colaboración con Diego Marín Editor, como distribuidor del producto, publicó el primer número de la trilogía ‘El chicle asesino’. Una surrealista historia, homenaje a las películas americanas de serie B, donde una masa de chicle extraterrestre amenaza al mundo.
El tercer número del fanzine ‘No me jodas, Pérez’, editado por Gregorio Lorente, antaño articulista y guionista de historietas, llegó puntual a su cita anual con un montón de textos de crítica mordaz y malintencionada hacia todo lo hediondo de la industria del comic nacional.
La mitad del número lo componía un sentido homenaje hacia el fallecido dibujante Manfred Sommer por parte del propio editor y las plumas de Manuel Barrero, el maestro José Ortiz, Paco Nájera y, bueno, sin estar a la altura, servidor de ustedes.
Mención aparte, en este recuento gráfico anual, merece el catálogo del certamen Mola Joven de Molina de Segura que publicó las historietas ganadoras de la edición 2007 aunque mezcladas, por bloques, con el resto de categorías a concurso.
2 comentarios:
Gracias por hacerte eco de mi trabajo a través de tu blog. Saludos
Alvaro Peña
Gracias por reconocer mi trabajo, un saludo y un abrazo.