El creador Albert Agulló expone 26 cuadros conmovedores e inquietantes Melancolía, crítica y color copan los elementos.

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El artista (d) y el edil de Cultura de Alicante, Miguel Valor, junto a uno de los cuadro.

Nunca la tierra y la madera expresaron tanto. Albert Agulló (Elche, 1931) conmueve e inquieta a partes iguales con las 26 obras que, desde ayer y hasta el próximo 19 de abril, se pueden visitar en las salas Taberna y Cuerpo de Guardia del Castillo de Santa Bárbara de Alicante.

La muestra, que recoge piezas desde el año 1995 hasta el 2008, se divide en tres partes diferenciadas. La primera de ellas, Encuentro con la poesía, es un homenaje a los poetas predilectos de Agulló, que como buen amante de este género se ha inspirado en odas de autores como Antonio Gamoneda.

«Quizá no son poemas románticos y decorativos, pero me identifico mucho con ellos y mi obra adquiere un cariz melancólico y turbador que no puedo ni quiero evitar porque cuando creo, no pienso si el cuadro quedaría bien o no en un salón. Sólo expreso y comunico lo que siento, y muchas veces, no se puede explicar qué representa el cuadro», explica el creador.

La crítica centra toda la segunda parte de la exposición, titulada Adocenados, que encontró su inspiración en la decisión de George Bush de bombardear Irak. «La primera muestra que hice en mi vida -narra Agulló- se expuso en el Casino de Elche y todos los cuadros representaban hogares de gitanos del barrio casitas de papel. Me dijeron que quizá era más vistoso pintar palmeras y me negué, porque yo pinto lo que me apetece y si se trata de cosas que pueden parecer más miserables no es mi culpa, sino de la sociedad».

En Fuerteventura, donde tiene un estudio desde hace más de 20 años, Albert Agulló ha encontrado la paz y la tranquilidad para crear su última serie, Poesía liberada. Se trata de piezas más libres y menos agresivas con colores amables obtenidos directamente de la tierra de esa isla. «No se puede imaginar uno lo que hay en ese lugar. Aquello es para descansar, abrir los ojos y disfrutar del paisaje, y quiero seguir trabajando en esa serie».

Arte y corazón

Albert Agulló, fundador del Museo de Arte Contemporáneo de Elche y del Grup d'Elx, estudió diseño de muebles y durante muchos años desarrolló su profesión como ebanista. «Fabricaba tallas -explica el creador- de estilo italiano, que era bastante moderno, con madera de haya y de pino».

Pero el arte se abría paso en él más allá de los muebles y, como no podía ser de otra forma, con la madera como soporte base empezó a desarrollar su estilo, tan genuino -«en el arte debes ser personal y cuanto más auténtico eres, más original serán tus obras»- y siempre en constante evolución -«si llega el día en el que no investigo, lo dejo»-.

Madera y tierra. Tierra y madera. «El arte plástico -concluye- debe hacerse directamente con las manos porque si no, se pierde el latido humano».

Fisgoneado en La Verdad.

This entry was posted on 2/20/2009 and is filed under , , , , , . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.