Día Mundial de la Lengua Materna.

La Organización de la ONU para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) ha dado a conocer la versión electrónica de la nueva edición su Atlas de las lenguas en peligro del mundo. Se trata de una herramienta digital interactiva que contiene datos actualizados de más de 2.500 idiomas que podrían desaparecer. Entre ellos se encuentra el euskera, mientras que el gallego y el catalán han desaparecido de la lista.

El Atlas, presentado con motivo del Día Mundial de la Lengua Materna, que se celebra hoy, señala que de los 6.000 idiomas existentes en el mundo, más de 200 se han extinguido en el curso de las tres últimas generaciones, 538 están "en situación crítica", 502 "seriamente en peligro", 632 "en peligro" y 607 "en situación vulnerable".

Un total de 199 idiomas cuentan con menos de diez locutores y 178 tienen un número de hablantes comprendido entre 10 y 50. Entre las lenguas muertas recientemente, el Atlas cita el manés de la Isla de Man, que se extinguió en 1974; el aasax de Tanzania, extinguido en 1976; el ubyh de Turquía, desaparecido en 1992; y el eyak de Alaska, que "murió" en 2008.

"La desaparición de una lengua conduce a la desaparición de varias formas de patrimonio cultural inmaterial y, en particular, del legado invaluable de las tradiciones y expresiones orales de la comunidad que la habla, que incluye poemas y chistes, proverbios y leyendas. Asimismo, la pérdida de los idiomas indígenas va también en detrimento de la biodiversidad, porque las lenguas vehiculan numerosos conocimientos tradicionales sobre la naturaleza y el universo", señaló Koichiro Matsuura, director general de la Unesco.

La desaparición de lenguas es un fenómeno patente en todas las regiones y se da bajo condiciones económicas muy variables. Así, por ejemplo, en el África subsahariana, cuya población usa más de 2.000 idiomas para comunicarse (casi un tercio de todos los del mundo), es muy probable que al menos el 10% de ellos desaparezcan en el próximo siglo.

India, Estados Unidos, Brasil, Indonesia y México, países con una gran diversidad lingüística, son al mismo tiempo aquellos que tienen más lenguas en peligro. En Australia hay no menos de 108 idiomas en distinto grado de riesgo, y, de los 26 que existen en Francia, 13 están "seriamente en peligro", ocho "en peligro" y cinco "en situación vulnerable".

En el caso de España, además del euskera, están en situación "peligrosa" el aragonés y el asturiano-leonés. Por su parte, el catalán se considera la lengua minoritaria más fuerte de Europa. También destaca la fortaleza del gallego, protegido por su proximidad al portugués.

Pero no todos son datos alarmistas. Papua Nueva Guinea, el país con la mayor diversidad lingüística del mundo (se hablan allí más de 800 lenguas), es también uno de los que, proporcionalmente, tiene menos en peligro. Además, hay lenguas que el Atlas considera extintas y que empiezan a revitalizarse. Es el caso del córnico (Cornualles) o el sîshëë de Nueva Caledonia, que podrían así transformarse de nuevo en lenguas vivas.

También ha aumentado el número de locutores de varios idiomas indígenas, como el aymará central y el quechua en Perú, el maorí en Nueva Zelandia, el guaraní en Paraguay y otras lenguas de Canadá, Estados Unidos y México.

Fisgoneado en Consumer.

This entry was posted on 2/25/2009 and is filed under , , , . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.