La investigadora murciana ha estado en Boston estudiando la nutrigenómica en el tratamiento dietético de la obesidad.

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Muchos pensarán que la dietética es simplemente una forma de enseñar al individuo cómo comer bien para conseguir reducir el peso. Y puede que tengan razón. Pero la investigación va mucho más allá y, aunque no lo parezca, los científicos se afanan diariamente por abrir nuevas líneas de investigación que hagan entender profundamente el porqué se altera el peso en las personas. Después de un año en la universidad Tufts de Boston, Marta Garaulet ha vuelto a Murcia con un interesante estudio bajo el brazo. Sus esfuerzos se han traducido en éxitos y ha conseguido determinar cómo se comportan algunos genes que pueden influir en el control del peso de las personas.

- ¿Qué es lo que ha estado investigando en Estados Unidos?

- Hemos llevado una muestra de 1.500 pacientes de Garaulet con un gran atractivo para la sociedad americana porque comen dieta mediterránea, son una población muy homogénea que no tiene interacción de genes de diferentes razas y quieren adelgazar, pero tienen una obesidad moderada. Con estos 1.500 pacientes hemos visto la efectividad del método Garaulet de terapia conductual y de dieta mediterránea. La primera publicación de Nutrition, una de las de más impacto en nutrición, ha determinado que es eficaz. El punto que le ha dado importancia a la investigación es que hemos comprobado que todo el mundo tiene una serie de barreras a la hora de adelgazar.

- ¿Cuáles son esas barreras?

- Durante el estudio las hemos identificado y hemos concluido que la principal barrera a la hora de seguir una dieta es la falta de motivación. La segunda es la falta de planificación. Otra es comer cuando estamos aburridos. Por último, hemos visto que el picoteo es otra de las grandes barreras que tenemos a la hora de adelgazar.

- Una vez que ya han identificado estas barreras, ¿qué más conclusiones han obtenido?

- Hemos analizado los genes de estos individuos, de los cuales el 80% son mujeres, y tras estudiar ciertos polimorfismos hemos podido determinar que el reloj biológico de cada persona influye en la obesidad. De tal forma que las personas que están más activas por la tarde tienden a tener obesidad abdominal mayor. Otro punto interesante es que las personas que duermen mal y tienen el sueño distorsionado están más gordos. También hemos estudiado sus genes reloj, sobre todo cuatro polimorfismos en un gen que se llama Clock y otro que se llama Per2, estos regulan el reloj interno y hemos sido los primeros en descubrir que el individuo expresa estos genes en el tejido adiposo. Hemos visto que los individuos que tienen el polimorfismo del gen Clock comen más que los que no lo tienen. Y también están más obesos y tienen más perímetro de cintura. Lo más interesante es que aquellos individuos que toman más aceite de oliva, aún teniendo estos moliforfismos, tienen menos obesidad y menos cintura.

- Estos estudios ¿se pueden poner ya en práctica?

- No. Estamos en un proceso de estudio. Hay 10 millones de polimorfismos en el ser humano y hemos estudiado 20. Estamos en plena investigación, pero el futuro es poder ofrecer la nutrigenómica para controlar el peso.

Fisgoneado en La Verdad.

This entry was posted on 3/04/2009 and is filed under , , , , , . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.